jueves, abril 25, 2024

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En el inició de la Cuaresma, Garachana pide intensificar la oración y participar en la celebración en todas las parroquias

San Pedro Sula.- Cuando la feligresía católica conmemora el inicio de la cuaresma, el obispo Ángel Garachana, en su mensaje  instó a “una vivencia más intensa de este tiempo de Cuaresma y a una continua conversión. Llamó a intensificar la oración personal y participar en las actividades especiales que se celebran en las parroquias invitando a todos, especialmente a los jóvenes”.

El Miércoles de Ceniza se celebra cuarenta días antes del Domingo de Ramos, día en que comienza la Semana Santa.

“Para encontrar hoy con alegría al que vive y viene a nuestro encuentro les propongo que recordemos el camino que venimos recorriendo como diócesis y nos dispongamos a seguir avanzando con el Señor”.

“La bendición que nos llega en esa marca de ceniza en forma de cruz va acompañada de una llamada: ‘Conviértete y cree en el Evangelio’ y el texto del evangelio de Lucas que escucharemos en la Vigilia Pascual de este año resuena así: ‘No busquen entre los muertos al que vive’”, señala el obispo en su mensaje.

MENSAJE COMPLETO DEL OBISPO ANGEL GARACHANA

En camino para compartir vida

Queridos hermanos me dirijo a todos ustedes cuando, una vez más, nos reunimos a buscar al Señor en este miércoles a traídos por el misterio de su amor y entrega. La bendición que nos llega en esa marca de ceniza en forma de cruz va acompañada de una llamada: “Conviértete y cree en el Evangelio” y el texto del evangelio de Lucas que escucharemos en la Vigilia Pascual de este año resuena así: “No busquen entre los muertos al que vive.”

Para encontrar hoy con alegría al que vive y viene a nuestro encuentro, les propongo que recordemos el  camino que venimos recorriendo como diócesis , y nos dispongamos a seguir avanzando con el Señor : Hace seis años celebrábamos los 50 de nuestra diócesis, de nuestro ser pueblo de Dios que camina en este departamento de Cortés. Convoqué con ese motivo el primer Sínodo Diocesano, pedimos al Señor que nos mostrara sus caminos; escuchamos en fraternidad su Palabra, revisamos las encrucijadas e hicimos discernimiento. Muchos de ustedes lo recuerdan y todos hemos recibido los frutos de las Constituciones Sinodales, del Plan Pastoral Diocesano, de los servicios y las estructuras de comunión generadas; de la entrega suscitada en mí, en el presbiterio, en la vida consagrada, en los agentes de pastoral y en todos. Damos gracias al Señor por todo ello y seguimos caminando juntos.

No voy a convocar un segundo Sínodo Diocesano, vamos a celebrar que somos “sínodo”, Pueblo de Dios en camino. Por eso les propongo que revisemos y evaluemos las líneas de acción, las propuestas y las estrategias del Plan Pastoral actual y que hagamos propuestas para elaborar el del próximo sexenio. Comenzaremos esa evaluación y generaremos nuevas propuestas especialmente a partir de la Pascua Ahora viviremos la cuaresma, junto a los catecúmenos, como tiempo de purificación de actitudes, siguiendo el ritmo de la liturgia dominical e intensificando la oración, el ayuno y la limosna.

A todos los ya incorporados a comunidades eclesiales les urjo a que participen y preparen con más interés sus reuniones semanales; a los miembros de caminos, asociaciones y movimientos también les insto a una vivencia más intensa de este tiempo de cuaresma y a una continua conversión a la sinodalidad, al “caminar juntos; a los que participan en las celebraciones del conjunto de la comunidad les pido que mantengan fielmente el ritmo dominical y que intensifiquen su oración personal y la participación en las actividades especiales que se celebran en todas las parroquias. Y a todos les ruego que inviten a otros, especialmente a los jóvenes, para que preparemos nuestro corazón para acoger con gozo el Evangelio de la Vida.

Después, a partir de la Pascua, en la diversidad de las pequeñas comunidades ya constituidas o en las nuevas que desde ya queremos suscitar, realizaremos con la ayuda de las guías oportunas la tarea de revisión, evaluación y nuevas propuestas. El Señor, nuestro único Pastor, nos conduce hacia fuentes de agua viva (Ap 7, 17). Revisar, evaluar proponer planes y actividades “pastorales” es tender permanentemente hacia esas fuentes para que todos tengan vida. Iniciemos con ilusión este camino.

+ Ángel Garachana Pérez CMF

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