San Pedro Sula.- ¿Qué mejor manera de conocer el verdadero amor que en la misma congregación donde ambos asisten? Así lo hizo esta pareja que con la inocente complicidad de Brayan Zelaya –el mejor amigo de Darwin–, tuvo el primer acercamiento hace 15 años. Y, aunque Ingrid no estaba muy interesada al comienzo, la complicidad surgió por partida doble, puesto que su mejor amiga, Gabriela Ordóñez, le aconsejó que se trataba del chico adecuado y era imposible dejarlo escapar.
Poco a poco, la pareja se conoció y ambos compartían una amistad increíble. No obstante, no sería hasta 7 años más tarde cuando comenzaron a verse como algo más, surgiendo entre ellos una chispa muy especial… Así, y viviendo una relación única, los jóvenes se casaban en una boda inolvidable luego de 8 meses de compromiso matrimonial.
Toda la boda de Ingrid y Darwin se celebró en el Hotel Maya Colonial de San Pedro Sula. La ceremonia civil y religiosa la vivieron en el salón Maya Imperial, apostando por un banquete y celebración postboda muy especial, llena de rincones preciosos, caracterizándose por un sinfín de elegantes contrastes.
Los novios combinaron a la perfección el carácter clásico de la ceremonia con la espontaneidad y alegría de la celebración posterior. Enamorados como el primer día, la pareja vistió su “sí, quiero” de una esencia puramente personalizada, que despuntó, gracias a la cuidada decoración de Waldina López de Eco Eventos y la amenización musical de Fernando Velásquez de ProAudioHN.
En definitiva, Ingrid y Darwin apostaron por mezclar su personalidad y sus dulces pasiones logrando un resultado inigualable. Ambos novios lucieron radiantes en su “sí, quiero”. Ella escogió un precioso vestido de escote palabra de honor y corte sirena, reflejando la pureza de su corazón en el blanco. ¡Una auténtica y delicada novia! Su look lo complementó con un bonito recogido y un bouquet en tonos nude y rosa. Por su parte, el novio se decidió por un clásico smoking oscuro, camisa blanca de etiqueta y por supuesto, una mirada enamorada dedicada a su bella esposa.
De esta fantástica noche fue testigo el equipo de profesionales de Farah La Revista. A partir de un gran número de imágenes exquisitas lograron retratar a la perfección la felicidad vivida en el “sí, quiero” de esta mágica pareja… Algo que también se reflejó en el rostro de los novios y sus selectos invitados. ¡Una velada nupcial memorable para todo aquel que la presenció! … La fiesta que Darwin José Guevara Mejía e Ingrid Margarita Martínez Torres organizaron como boda…Sencillamente ¡inolvidable!
Por: Dayana Ortiz
Fotografías: Samuel Romero