San Pedro Sula.- Nicky y Melissa se conocieron de la manera más inesperada gracias a la tía Mirtha Mariona, –que sin saberlo, fue toda una Celestina– y allí, en su casa, hace 3 años, se concretó el encuentro que 2 meses después culmino en un romántico noviazgo. Él se enamoró de ella nada más al verla. En cambio, ella, tímida y recatada, como toda una dama, esperó el tiempo perfecto para aceptar sus galanterías mientras el caballero le llegaba al corazón.
Y así empezó esta bonita historia de amor que luego de 2 años de sólida relación los llevó ante el altar en una mágica ceremonia que oficio el pastor Pedro Moreno de la Iglesia de Cristo Ebenezer. Luego de 12 meses de compromiso matrimonial, esta pareja selló su amor en el salón Las Islas del Hotel y Club Copantl, la opción perfecta considerando la belleza y elegancia de lugar.
Vestida de punta en blanco con un modelo exclusivo que la diseñadora sampedrana Karen Maldonado elaboró a su medida, Melissa ingresó al recinto del brazo de su orgulloso padre, Evelio Castillo. Una novia elegantemente tradicional en el sentido estricto de la expresión, puesto que su velo al frente, reflejaba no solo la nitidez de su corazón, sino además la pureza misma de sus convicciones como mujer.
Un look nupcial de corte princesa y larga cola, elaborado en encaje rebordado y escote V, se complementó con el cinturón de fino swarovski que acentuó su femenina imagen, armonizando su ajuar con un bouquet en cascada y su velo corto. Apostó por la comodidad y delicadeza de sus zapatos Aldo y un perfecto semirrecogido suelto y desenfadado en su cabello. Nicky, como todo un caballero, eligió para su gran noche un smoking oscuro, reflejando así su sobria personalidad ¡fabulosos!
Una vez terminada la ceremonia, llegó la celebración con aperitivo y banquete. Una recepción que esta pareja preparó dedicadamente de la mano con su wedding planner, Tania Machado de Discua, en una boda “All White” con pinceladas en nude entre un sinfín de detalles personalizados ¿A destacar? El encanto indiscutible de la decoración de las mesas, la sesión fotográfica, el “candy bar” y, por descontado, las miradas de romántica complicidad de los recién casados, mientras amigos y familiares compartían con ellos su gran noche. ¡Brillante!
Farah La Revista tuvo el privilegio de captar instantes mágicos de este fantástico enlace. Sin duda, un recuerdo atesorado de la felicidad que compartieron Nicky Ortega y Melissa Castillo con sus seres queridos. Consiguió imágenes con el baño de luz preciso y mucho color que enamoraron a estas almas correspondidas y, seguro, que a cada uno de nuestros seguidores.
Por: Dayana Ortiz
Fotografías: Samuel Romero
