San Pedro Sula.– Tras meses de espera en la frontera norte de México, los hondureños solicitantes de asilo en Estados Unidos comienzan a desesperarse y están pidiendo retornar de forma voluntaria al país, tal y como lo hicieron 129 compatriotas que llegaron este miércoles por vía aérea a San Pedro Sula.
El vuelo, organizado por la embajada de Honduras en México y financiado por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), salió de la ciudad de Matamoros (Tamaulipas), donde los hondureños llevaban varios meses de espera.
El embajador de Honduras en México, Alden Rivera Montes, informó que los retornados venían en 55 grupos familiares, constituidos por 32 hombres, 30 mujeres y 65 menores acompañados de sus padres; además, retornaron dos adultos solos.
Rivera Montes detalló que el nuevo Consulado Móvil de Honduras en Matamoros expidió los salvoconductos para que los compatriotas pudieran salir de México mediante la modalidad de Retorno Voluntario Asistido (AVR) a través de la OIM.
Aseguró que debido a los altos índices de violencia de esa ciudad mexicana se están haciendo las gestiones para que los hondureños que son devueltos por las autoridades estadounidenses a México sean trasladados a puntos fronterizos menos vulnerables.
De la misma manera las autoridades de la embajada de Honduras en México anunciaron que los procesos de atención a los migrantes en situación de espera que deseen regresar voluntariamente a Honduras seguirán abiertos durante los próximos meses y que pronto se habilitará esta misma opción de retorno voluntario desde Nuevo Laredo, Ciudad Juárez y Tijuana.
El vuelo llegó al aeropuerto sampedrano a las 3:00 de la tarde y posteriormente los compatriotas fueron trasladados Centro de Atención para la Niñez y Familias Migrantes Belén, ubicado en San Pedro Sula.
En Belén los compatriotas fueron recibidos con un plato de sopa caliente; posteriormente hicieron el Control Biométrico con personal del Instituto Nacional de Migración (INM) y llenaron una ficha socioeconómica para optar a los diferentes programas de reinserción social y de oportunidades que ofrece el Gobierno.
Los menores retornados también reciben atención médica y psicológica; posteriormente, si son menores no acompañados, un grupo de especialistas de la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia (Dinaf) les brinda seguimiento para garantizar que se cumplan sus derechos.
Asimismo, con el apoyo de la Cruz Roja Hondureña se les brinda una llamada para que puedan comunicarse con sus familiares acá en Honduras, se les proporciona un ticket para que puedan trasladarse a sus lugares de origen y si lo requieren se les brinda un albergue temporal.
